INTERNACIONALIZACIÓN DE UNA EMPRESA

LA INTERNACIONALIZACIÓN DE UNA EMPRESA PASO A PASO

Sigue estas fases en la internacionalización de una empresa y lograrás
implantarte en mercados exteriores con todas las garantías.

QUIERO INTERNACIONALIZAR MI EMPRESA

Érase una vez Pepe. Como fabricante de bolsos de mimbre artesanos “made in Spain”, soñaba con
conquistar nuevos mercados. Comenzó a investigar y se enfrentó con la dura realidad…

Para empezar, no contaba con los recursos logísticos necesarios para traspasar las fronteras de la
península. Por supuesto, de inglés ni papa. Además, bastante trabajo tenía produciendo como para
leerse el BOE y descifrar si podía acogerse a alguna subvención para internacionalizar su empresa.

Ante esta situación, nuestro amigo Pepe decidió entonar un “Más vale malo conocido que bueno por
conocer” y descartó la idea de explorar otros mercados. Como tantas otras pymes que, hasta hace
unos años, se sentían incapaces de iniciar un proceso de internacionalización.

Sin embargo, hoy todo ha cambiado. Hay nuevos medios de pago que nos permiten mover dinero
entre países sin trabas. Por no hablar de las tecnologías con las que podemos comunicarnos con
nuestros clientes con tanta claridad como si estuviéramos sentados en la misma sala de reuniones.

Esta interconexión ha dado lugar a que las grandes empresas dejen de ser las únicas con acceso a
mercados internacionales. Ahora, también las pymes y los pequeños emprendedores pueden tener
el mundo a sus pies.

Te contamos qué pasos seguir hasta construir una empresa internacionalizada. Vamos a abrir boca
despejando una primera incógnita.

 

¿QUÉ ES EL PROCESO DE INTERNACIONALIZACIÓN DE UNA EMPRESA?

Se trata de expandir tu negocio hacia el mercado internacional, pero no a base de ventas
puntuales u oportunistas.

Hay diversas causas que conducen a la internacionalización de una
empresa. Una de las más frecuentes es que se produzca una crisis en el mercado nacional.

Cuando esto ocurre, muchas pymes emprenden una huida hacia adelante, planteándose el comercio exterior
como alternativa.

¡Grave error! En esos momentos de necesidad, la empresa no piensa de forma estratégica y se limita
a apagar fuegos. En cambio, asentarse en mercados exteriores pasa por elaborar un plan de
internacionalización de una empresa.

Hay que tener en cuenta, por otro lado, que existen diferentes formas de internacionalización de
una empresa. Cada empresa ha de estudiar los recursos de que dispone para elegir la más adecuada
y trazar una estrategia coherente.

La moraleja es que, si quieres adentrarte en la aventura que es el proceso de internacionalizacion de
una empresa, tienes que ir paso a paso. En ROI + Export, te ofrecemos nuestro acompañamiento
para que vayas sobre seguro.

 

¿CUÁLES SON LOS REQUISITOS PARA LA INTERNACIONALIZACION DE UNA EMPRESA?

El trabajo de internacionalización de una empresa es una carrera de fondo, que requiere convicción,
implicación y fuerza de voluntad.

Las claves para la internacionalización de una empresa son:

Capacidad de análisis.

¿Estás preparado para cumplir con las demandas del nuevo mercado? ¿Cuál es el producto
más adecuado para el país de destino?

Organización.

¿Qué estrategias para la internacionalizacion de una empresa implementarás?

Flexibilidad.

¿Puedes adaptarte a las necesidades del mercado exterior? ¿Incluso desarrollar un nuevo
producto o servicio?

 

¿CUÁLES SON LAS FASES DE INTERNACIONALIZACION DE UNA EMPRESA?

Ya hemos mencionado que la internacionalización de una empresa comercial dista mucho de la
exportación ocasional.

No te lances a lo kamikaze y sigue una estrategia en tres pasos:

Fase 1: estudio preliminar.

La primera de las etapas para la internacionalización de una empresa es definir el punto de
partida de tu proyecto.

– Análisis interno.

Las conjeturas no son una base fiable para expandir tu negocio a mercados
internacionales. Analiza datos para tener una perspectiva real de dónde te encuentras.

Una buena opción es hacer un DAFO (debilidades, amenazas, fortalezas y
oportunidades), que te facilitará una radiografía de tu empresa.
Otro punto clave es mirarte el bolsillo, ya que la internacionalización de una empresa
implica gastos. Asegúrate de tener un colchoncito que te aporte margen de maniobra.

Un detalle que se pasa por alto con frecuencia en la internacionalizacion de pequeñas
empresas es su capacidad productiva. ¿Alcanzará a cubrir las necesidades de los nuevos
mercados?

– Creación de departamento internacional de una empresa.

En la internacionalizacion de empresas familiares, somos testigos de un error frecuente:

improvisar un departamento de exportación a base de recursos humanos de otros
departamentos.

Para desarrollar los mercados exteriores, es necesario contar con personal especializado
en temas legales y jurídicos (entre ellos, fiscalidad, derecho arancelario o normas de
comercio internacional).

Además, tu inversión en ferias internacionales o viajes de prospección caerá en saco
roto si no cuentas con un equipo con experiencia en exportación.

¿Sabías que en ROI + Export ponemos a tu disposición equipos externos para ayudarte a
internacionalizar tu proyecto? Si quieres más información, haz clic aquí.

– Definición de objetivos de internacionalizacion de una empresa.

Un barco no llegará a ningún puerto si no tiene un rumbo marcado.

La falta de metas a
corto y largo plazo es uno de los factores que afectan la internacionalización de una
empresa. Asegúrate de definir adónde quieres llegar para que tu departamento de
exportación sepa en qué sentido tiene que mover el timón.

Fase 2: creación de una estrategia comercial.

Llegamos a uno de los puntos clave del proceso de internacionalización de la empresa
española. El departamento comercial elaborará un plan de acción encaminado a superar
obstáculos en la internacionalizacion de una empresa.

En esta etapa, hay que definir 3 aspectos:

– Mercado: valora cuánto tiempo tardarás en tener presencia en un mercado y la
inversión que supondrá. Divide los mercados potenciales entre estratégicos y
complementarios, según el ROI que pueda generarte cada uno.

– Producto: ¿te suena lo de venderle hielo a un esquimal? ¡Mala idea! Elige el producto a
internacionalizar tras haber estudiado la demanda existente en el país objetivo.

– Canal: plantéate si necesitas presencia física. De ser así, valora si quieres contar con
puntos de venta propios o apoyarte en una red de distribución local. Ambas opciones
tienen sus ventajas e inconvenientes.

Y un apunte: no descartes internet como alternativa para vender en remoto. Sobre todo,
si te estás planteando la internacionalización de una empresa de servicios.

Fase 3: implantación.

Llegamos a la última de las fases del proceso de internacionalización de una empresa. Es el
momento de la verdad, cuando lanzas tu producto al mundo. De nuevo, vamos a definir 3
pasos en esta etapa de la internacionalizacion de empresas.

– Aterrizaje: entras en el país de destino para tantearlo y adaptar tu producto, si es
necesario.

– Crecimiento: comienzas a generar más rotación y ganar visibilidad. Toca hacer un
estudio para decidir si promocionarte en ferias o eventos, invertir en una web o crear
perfiles en redes sociales.

– Consolidación: el objetivo es establecerte como un líder en el sector, haciendo hincapié
en tu valor diferenciador con respecto a la competencia.

Y hasta aquí llega el proceso de internacionalización tradicional de una empresa. Podríamos contarte
mucho más sobre las ventajas y desventajas de la internacionalización de una empresa y las razones
porque una empresa decide internacionalizarse. Sin embargo, ya te hemos dado bastante que
pensar, ¿no crees?

Si quieres que te ayudemos a afrontar el reto de expandirte a nuevos mercados exteriores con paso
firme,
Y recuerda que no hay empresa pequeña, solo
recursos mal utilizados.
 

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